Intentando disminuir mi hiperactividad...

Shia Azakami, capitana de la División Tres tenía poco que dejó su oficina para despejar su mentes, ya que si seguía un minuto más en su oficina, su hiperactividad aumentaría.

La joven capitana entró a la División Nueve alegre y despreocupada, y siguió hasta entrar a la oficina, pero cuando abrió la puerta deslizante, sus ojos color miel se mostraron soprendidos al ver la ofcina de la capitana de aquella división.

¿Esta es una...oficina?-se preguntó ante el lugar que estaba infestado de plantas y sobre todo de flores-¡Pero sí es un invernadero!-exclamó.

Shia de parecer despreocupada, pasó a estar asombrada al ver los detalles que tiene cada rincón de la oficina de la capitana Yuri Hiwatari, que comparándolo con su oficina, le faltaba más decoración.

¿Qué clase de lugar es este?-se preguntó-Esto no parece la oficina de un capitan, parece del jardinero o algo por el estilo

Lo que más le llamó la atención a Shia era el jardín que la capitana tenía, muy bien ciudado, podría decir que aquella persona le tiene mucho amor hacia las plantas, sobre todo a las flores de distinos colores.

Miró fijamente el pasto, muy bien ciudado, sin el rastro alguno de yerbas. Sin embargo logró percatarse de que había ciertos castigos severos de aquella persona quien ose dañar su preciado jardín.

Creo que ensuciará más su jardín con sangre, si castiga de ese modo a los invasores...-pensó en sus adentros.

De tanto mirar asombrada, Shia se dio cuenta de que Yuri Hiwatari, dueña de este lugar no había llegado.
Supongo que a las flores no les molesta que esté aquí un rato a esperar a su cuidadora-dijo recobrando su alegría-Espero que no le importe si tomo algunos de sus papeles-tomó algunos papeles de su escritorio que para ella es la única parte normal de toda esta oficina.

Shia, también tomó algún lápiz que por ahí estaba en el escritorio de Hiwatari y un cuaderno o algo que le sirva de soporte. Y finalmente se sentó en frente del jardín y comenzó a dibujar la belleza que había en aquel lugar extraño en lo que espera a su dueña.

Yuri Hiwatari se dirigía a la división 3 hasta que sus sentidos la interrumpieron...

-Siento un reiatsu bastante fuerte... en mi división- pensó la joven de ojos morados.

Sin demora, llegó a su división de un shumpo, tal vez uno de lo más rápidos que había hecho. Tal era la preocupación que tenía por sus bellas plantas que no le importaba sobrepasar sus límites.
Entró a su división corriendo. El piso de madera tan limpio le hizo patinar hasta llegar a la puerta de su oficina la cual estaba abierta. De alguna manera Yuri logró frenarse y entró rápidamente a su oficina. En ella encontró casi todo en orden. Al parecer no había ningún daño. Se adentró hasta el jardín donde encontró a una shinigami de larga cabellera oscura, y no era una shinigami cualquiera pues portaba la haori de capitán. En sus manos tenía un cuaderno y un lápiz, estaba dibujando algo.

La capitana de la división 9, con paso lento, se acercó a la capitana de cabello oscuro, en su mente las flores le decían quién era...

No te preocupes, Yuri-san. Ella no nos ha hecho ningún daño.

Y más le vale que no tenga las intenciones de hacerlo.

Yuri-san, a veces eres muy desconfiada ^^U.

Lo sé. ¿Cómo se llama aquella capitana?

Ella es Shia Azakami. Capitana de la división 3. Ya deberías saber quién es, ¿acaso no fuiste a la reunión de capitanes?

Sí fui, pero no me acuerdo de su cara. Sólo recuerdo que las flores que llevé me dijeron que ella estuvo haciendo estrellitas de papel durante la reunión. En fin. Hablaré con ella.

Se acercó lo suficiente como para ver lo bien que dibujaba el jardín. Observó cuidadosamente el dibujo. Sólo le faltaba color para que fuera una foto de su bello jardín. Ya era hora de entablar una conversación con ella, por lo que Yuri empezó a hablar...

-Dibujas muy bien ^^.- dijo la capitana de cabellos color lila, ofreciéndole una rosa blanca...

Shia siempre entraba como en un estado de trance cada que ella dibujaba o pintaba, lo que podemos decir que está demasiado concentrada para no haberse dado cuenta de que Yuri Hiwatari había llegado.

Al momento en que Yuri le acaba de dar su comentario de su obra de arte, mas la flor que la había ofrecido, Shia reaccionó espantada, se acaba de desconcentrar de dibujar al jardín.
¿Qué?-dijo al voltear ante la capitana, finalmente se mostraba la identidad de Shia para la capitana recien ingresada. De larga cabellera oscura, con uos mechoes en su frente, cuyos ojos color miel miraban con curiosidad hacia la recien llegada. Tenía unas pequeños artes en forma de una hoja plateada, mientras que tenía un arte en forma de aro en su oreja izquierda. Y poratab un collar con forma de media luna y medio sol juntos.

Finalmente reaccionó ante el comentario que le hizo Yuri.
-Gracias-respondió alegre y tomó la flor que le ofrecía-Disculpa mi reacción, pero así me pasa cuando me inspiro a dibujar.-Shia dejó lo que estaba haciendo-Enseguida regreso.

Shia realizó un gran shunpo, y después de un par de minutos regresó con dos grandes vasos cerrados, la capitana de la División Tres no podía dejar de saborear el olor que había dentro de los vasos que traía.

Traje café de mi oficina-dijo muy orgullosa-Tengo una máquina que hace toda clase de café, así que te doy a probar-dijo mientras el ofrecía un vaso de color blanco, mientras que también cargaba otra vaso pero de color rojo.
Espero que te guste el sabor moka-dijo alegre, pero sentía que olvidaba algo

-¡Ah, sí es ciero!-exclamó-No me he presentado, mi nombre es Shia Azakami

Ya que Yuri cruzó palabras con Shia Azakami la desconfianza que se había apoderado de ella antes de entrar a su oficina había desaparecido por completo. La capitana de la división 9 ahora pensaba en aquella shinigami que hace estrellitas de papel en las juntas mientras ésta, con un gran shumpo, se fue y regresó con dos vasos. Contenían café, o al menos eso supuso la shinigami de cabellera lila. Después su suposición fue confirmada por la misma Shia Azakami. De repente la capitana de la división 3 pronunciaba sus palabras como si ella y Yuri ya se conocieran, pero se dio cuenta de que ni se había presentado. La joven de ojos morados solamente mostró una sonrisa, pues se daba cuenta de que la shinigami de ojos color miel no era una mala persona. Luego de su presentación Yuri tomó el vaso de café que le ofrecía Shia con la mano izquierda y habló...

-Con que Shia Azakami ¿eh?- dijo Yuri ofreciéndole ahora su mano derecha para saludarla como es debido. -Las flores me dijeron que hiciste estrellitas de papel en la reunión de capitanes ^^. Yo soy Yuri Hiwatari, capitana de la división 9. Mucho gusto.- decía sonriente Yuri Hiwatari mientras disfutaba del delicioso aroma del café sabor moka...

Shia rió ante el comentario de Yuri sobre las estrellitas de papel, la verdad no tenía nada mejor que hacer, se encontraba o mas bien se sigue encontrando hiperactiva. Tenía que hacer algo para que no se quede estancada en el mismo lugar.

Verás, tenía que hacer algo mientras escuchaba lo que decía el comandante general Ailann Cole-dijo Shia-Aunque eso no signifique no le preste atención.-continuó-Es comprensible que los nuevos me vean de este modo para preguntarse que si soy una capitana, déjame decirte que ya llevo un pequeño rato en esto, hay de toda clase de shinigami, hay unos que están más apegados a las reglas, hay shinigamis alegres, misteriosos, otros muy apegados a las reglas, otros fríos, es lo mismo en el caso de los humanos que viven en sociedad.-dijo algo seria mientras tomaba un poco más de café que estaba muy caliente, aunque dejó de tomar debido a que su caliente necesitaba enfriarse un poco más.

Creo que exageré con calentarla de más-pensó mientras todavía sentia la sensación en su boca de lo caliente que estaba ese sorbo de café que se tomó.

Shia le contaba unos de sus tantos momentos hiperactivos, parece que entretuviera bastante bien a la nueva capitana de la División Nueve, sin embargo, la joven de oscuro cabello sentía que se la pasaba bien. Por extrañas razones, sentía que en el ambiente en que se encontraba, no sabía si era por la cantidad de reiatsu que había en la habitación o sea la propia oficina, pero sentía que antes había bastante tensión por parte de Yuri, a que se sentía de una forma tranquila y en confianza.

Luego se percató de que las flores estaban más cerca que antes, como si fueran atraídas hacia algo.

De pura casualidad-dijo Shia un poco extrañada por el extraño evento que sucedía-¿Las flores están embrujadas?-dijo de una forma sarcástica porque ha visto miles de cosas inexplicables en sus años como shinigamis, pero que las flores se acercarán como si nada.-Porque había algo muy extraño con esas flores desde que llegué, y me sentía observada, y al parecer cuando empecé a dibujar, esa sensación desapareció.-dijo mientras tomaba un poco más de café.-Por cierto,¡¿ tendrás galletas?-preguntó alegre como siempre ya que sentía que le hacía falta algo a su delicioso café.

Yuri Hiwatari disfrutaba de las anécdotas de hiperactividad de la capitana de la división 3. Al principio siguió con su idea de cómo una persona tan hiperactiva había llegado a ser capitán de una división. Cada momento que pasaba con la shinigami de cabello oscuro estaba lleno de alegría, risas y todo lo que podrías compartir con un amigo. Tal vez Shia Azakami se convertiría en la primera amistad que tiene Yuri desde la muerte del anterior capitán de la novena división.

Entre tantas emociones provocadas por las historias de la shinigami de ojos color miel las flores que abundaban en la "oficina" de Yuri Hiwatari se acercaban a la recién conocida capitana de la división 3, hecho del cual también se percató la susodicha, por lo que no pudo evitar preguntar que si las flores estaban embrujadas. La chica de cabellera lila soltó una risita, y antes de contestar la pregunta de la otra shinigami presente las flores empezaron a hablar en su mente...

¡No estamos embrujadas! ¬¬

Tranquilas, no lo dijo por querer ofenderlas ^^U, además, seguramente cualquier persona desconocida a la cual se le acercan ustedes pensará que están embrujadas.

¿Pero cómo se atreve a pensar eso?

Pues simplemente se le ocurrió eso. Dejen le explico, por ahora, sólo cálmense.

Después de la pequeña discusión que tuvo la capitana de la división 9 con las flores solamente sonrió y empezó a hablar...

-No están embrujadas n_nU. Las flores, al igual que nosotros, tienen alma y vida, aunque muchas personas no comprenden eso,- la sonrisa de Yuri se volvió una mirada fría por un momento, -y hay algunas personas que pueden comunicarse con las flores e incluso darles un poco de más libertad de movimiento. Ellas también sienten y perciben las malas intenciones de las personas, y más si las cuidas muy bien n_n. Espero que no te moleste que se acerquen a ti ^^.- dijo finalmente Yuri, recobrando la sonrisa que tenía hacía un instante.

La shinigami de ojos morados abrió los cajones de su escritorio y encontró en uno de ellos unas deliciosas galletas de chispas de chocolate, cosa que, aunque no lo demostrara, Yuri Hiwatari adoraba. Sacó las galletas del empaque y las puso en un plato, posteriormente se las ofreció a la capitana de la división 3. -Aquí están las galletas. Espero que te gusten tanto como a mí ^^.-

Shia tomó gustosa una de las deliciosas galletas que le había ofrecido Yuri, quien le había explicado lo de las flores. En cierta forma síntió que había aprendido a algo y era el prestar atención a todo lo que se encuentra a su alrededor incluyendo hasta el más mínimo detalle.

-Por lo que dijiste, comprendes mejor que nadie a las flores-comentó-Y les tienes un gran cariño, u no lo digo por lo que dijiste, las flores parecen estar llenas de vida-continuó-¿Y ya alguna vez haz mostrado tu jardín? Porque realmente sería bueno que se mostrara tal belleza que no puedo mostrar del todo a través de dibujos; ¿o no te gusta compartilo?

Shia quería saber más cosas sobre Yuri, las flores la han intrigado, hasta si la capitana de la División Nueve quisiera mostralo ante el mundo. Sin embargo, presentía de la respuesta que podía dar Yuri.

Sin embargo, en eso, podía sentir la fuerza de su zampakutou, suyo espíritu Hiroly, le trataba de decir que se estaba pasando de hacer preguntas a Yuri, Shia sólo dio una ligera sonrisa hacia su zampakutou.

Tranquilo Hiroly, todo saldrá bien, no creo que se vaya a enojar.-pensó


No tienes que darme alguna respuesta ahora-dijo Shia tratando de no presionar mucho a la capitana de la División Nueve.-Y por cierto, ¿no quieres salir a alguna parte por el Seiretei o por algún rincón de la Sociedad de Almas?-preguntó en un repentino cambio de tema, y la shinigami que es la capitana de la División Tres le daba una ligera sonrisa.

Yuri Hiwatari escuchaba alegremente las preguntas de la capitana de la división 3. Sus premoniciones no estaban mal, de hecho, nunca lo están. La shinigami de cabello lila ya había visto la clase de persona que era Shia Azakami... en su mente. Claro que, aún no tenía la confianza de decirle de esa habilidad.

Mientras tanto, la capitana de la división 9 escuchó una de las preguntas de la chica de ojos color miel. Al principio, se puso a pensar en su respuesta. La verdad es que no le había mostrado a muchas personas su jardín. Sólo los miembros de la división 9 conocían aquel jardín...

Pues... digamos que los únicos que conocen la belleza de estas flores son mis subordinados. Sí me gustaría compartir esta belleza, por eso no sólo hay un jardín aquí n_n. Este edificio está rodeado por un gran jardín del que todos pueden disfrutar.- seguía sonriendo la pálida por naturaleza shinigami.

Justo después de la última pregunta de Shia Azakami, las flores crecían acercándose a Yuri. Al parecer tenían alguna información, idea o lo que sea que quisieran compartir...

Yuri-san, deberías salir un rato. Las flores de las calles del Seireitei nos dijeron que es un buen lugar para caminar.

De acuerdo. Se lo diré a Shia. El único problema es que estoy esperando a mi teniente, así que le tendré que decir a Shia que se adelante ^^.

Ya recibida la información de las flores, la capitana de la división 9 tomó varios tragos del café que su visita le había traído, luego terminó de comerse una galleta y se levantó de su asiento para recoger un papel de su escritorio...

Las flores me dijeron que las calles del Seireitei son un buen lugar para caminar. Además, tengo que aprendérmelas. Tal vez te gustaría ir ^^. Yo tengo que esperar a que llegue mi teniente. No me tardaré mucho ya que está por llegar. Si quieres, puedes adelantarte n_n

Shia escuchó atentamente lo que le decía sobre la flores, con su respuesta de que no todos conocen su jardín, era mas bien "privado" sería la palabra que mejor la definía para la capitana de la División Tres.

Parece que no lo comparte con cualquier persona-pensó para sí misma.

Después de eso, Shia pudo notar cómo las flores de distintos hermosos colores se acercaban con ansias hacia la capitana de la División Nueve, y ésta los recibe de una cálida manera haciendo que el ambiente se sienta más cálido, por lo poco que Yuri le habia platicado sobre las flores, parecieran que le estaban diciendo algo importante. Esperó un momento mientras veía la débil forma de Hiroly mirando a Yuri de forma incrédula.

La flores son extrañas-comentó Hiroly en la mente de Shia-Debes de tener ciudado con ella-con esta última sugerencia, Shia le dio una galleta directamente en el hocico, dejando a un Hiroly una mirada llena de odio a su dueña.

Tranquilo, Hiroly, no va a pasar nada, y sabes lo bien que nos podemos defender. Este no es el mometo para estar de desconfiados, hay que dar un lugar para todo.

Después de que Yuri hablar con las flores, ésta le dijo sobre querer caminar sobre el Seiretei, cuyas calles han de estar tranquilas. A Shia no l pareció mala idea, pues ahora las cosas estaban "tranquilas" como para que el Seiretei esté perturbado.

Yuri también le mencionó que tenía que esperar a su teniente, así que le pidió que se adelantara. Para la mente de Shia, sólo le llegaba el recodatorio que todavía no tenia ni teniente ni tercer oficial, prácticamente está sin mucho que hacer aparte de hacer su parte como capitana de su División.

Descuida, ya veré algo que hacer en el Seiretei, tú espera a tu teniente ya que tu si lo tienes-dijo riéndo-Luego te doy mi dibujo terinado de tu jardín, fue un gusto conocerte, Yur, y ten esto, te dará buena suerte.

Diciendo eso alegremente, le dio una bolsita transparente llena de estrellitas de papel, luego, tomó la flor que le regalo, y su cuaderno para después realizar un shunpo provocando que algunos papeles volaran del escritorio de Yuri.